Feliz Autismo: Adriana Hace Magia con sus Pies

Adriana Hace Magia con sus Pies

El hecho de nacer sin brazos no ha sido obstáculo para que una mujer de 30 años de edad haya logrado tener una vida como la de cualquier profesional exitosa

“Las manos son muy esenciales para ustedes, pero para mí son la oportunidad de descubrir la vida de otra manera, y de saber que la vida sigue a pesar de las circunstancias difíciles”.

Carisma, vitalidad y un espíritu lleno de esperanza son las características que describen a la mexicana Adriana Irene Macías Hernández, una mujer de 30 años de edad que nació sin brazos, pero que no ha sentido por eso impedimento para detenerse en el rumbo hacia el éxito.

Es atractiva, sonríe mucho, camina con dinamismo y, cuando se sienta, sus pies pasan a ser sus manos. Los coloca sobre la mesa y con ellos marca sus expresiones. Lucen muy cuidados, con impecable pedicure. En el derecho usa el anillo de matrimonio. Los mueve hacia su rostro para apartarse el cabello. Habla de sus libros: “Abrazar el éxito” y “La fuerza de un guerrero”. Toma alguno de ellos para hojearlo y sus dedos súper flexibles le facilitan la acción. Poco después, toma lápiz y papel y hace alguna anotación. Tiene bonita caligrafía.

Macías obtuvo el título de abogada con su tesis, en la que propuso la Ley para Salvaguardar los Derechos de las Personas con Discapacidad, y se ha convertido en la esperanza de muchas de ellas.

Considera que la clave en su vida ha sido la tenacidad, la fórmula para el éxito es la actitud, el ímpetu y la inteligencia que se le ponga al día a día.

Siempre ha contado con el apoyo familiar. Su hermana Elia Eloísa Macías Hernández es un año mayor que ella, y son un complemento una para la otra

“No se trata de mostrarme como la desvalida que se ha superado, sino de imbuirle confianza a las personas para que superen sus propios problemas. Todos en algún momento nos quejamos, pero existen algunos, como yo, que con nuestras limitaciones podemos ver el otro lado del sol”.

Forma parte de la Fundación Incluye (Instituto Cultural, Lúdico y Educativo), creada por su esposo, que se encarga de promover la eliminación de los prejuicios contra los discapacitados en México.

Además, apoya albergues para jóvenes con adicción a las drogas, deseos de suicidio, cáncer, anorexia y bulimia.

En 2006 publicó “Abrazar el éxito”, donde cuenta las experiencias de su infancia, anécdotas, amores, las largas horas de terapia y hasta los momentos más difíciles que ha vivido.

Narraciones sorprendentes, desde superaciones hasta desprecios y de cómo obtuvo las habilidades que la destacan están plasmadas en cada página de su primera publicación.